martes, 4 de marzo de 2014


 

TENDINOPATÍA AQUILEA - TRATAMIENTO TENDINITIS DEL AQUILES

El tendón de Aquiles tiene una forma redondeada, por lo que está diseñado principalmente para soportar grandes fuerzas tensionales, no posee vaina sinovial pero sí una capa de células ricamente vascularizada, que se origina en el músculo Tríceps Sural hasta su inserción en el Calcáneo. Con un trayecto descendente de sus fibras  a unos 2-7 cm de su inserción existe una zona pobremente vascularizada.
La tendinopatía de Aquiles, una de las patologías que puede sufrir este tendón, puede afectar a deportistas habituales, esporádicos e incluso personas inactivas. Normalmente suele darse en la parte central del tendón aunque también en la unión del tendón con el hueso.
No se trata normalmente de una patología inflamatoria sino degenerativa, una respuesta fallida ante una curación, produciéndose un engrosamiento y una estructura irregular del tendón, siendo la fuente del dolor una posible nueva neurovascularización dentro del tendón. No se sabe exactamente, de manera científica, cuál es la causa real del dolor, se cree que es una combinación de las causas mecánicas y bioquímicas. El dolor puede aparecer al ponernos de puntillas o saltar sobre esa pierna y duele la zona del tendón.
Existen factores intrísecos, propios de la persona, que pueden predisponer a padecer esta patología como son: hiper o hipopronación del pie, pie cavo o plano (problemas en la pisada), tibia vara, dismetría de MMII, desequilibrios musculares, disminución de la flexibilidad sobre todo de la cadena posterior, hiperlaxitud, hipomovilidad en alguna articulación: lumbares, pelvis, cadera, rodilla o tobillo, la edad, obesidad, nutrición-hidratación, medicación, hipertermia, procesos patológicos anteriores, factores metabólicos y endocrinos… Así como también factores extrínsecos, externos a la persona, como son: carga excesiva de actividad, la superficie donde se desarrolla la actividad, calzado, errores de entrenamiento, factores medioambientales…
El tratamiento conservador constaría de un programa de ejercicio excéntrico del tendón para aumentar la producción de colágeno aumentando la fuerza de tracción y la capacidad de absorber la carga; además de hacer desaparecer la neovascularización. Se acompañaría de una normalización de las tensiones musculares del Triceps Sural e isquiotibiales con diferentes técnicas manuales, mejorar el deslizamiento del tendón con fibrolisis diacutánea, US y Láser, crioterapia post-esfuerzo, estudio de la biomecánica de columna y MMII reequilibrando lo que fuera posible, un aumento de la flexibilidad de la cadena posterior con trabajo analítico articular y muscular y trabajo global con RPG/SGA y revisar las condiciones en las que se realiza la actividad física y/o laboral.
En Premiummadrid podemos abordar la Tendinopatía en su globalidad: para su prevención, tratamiento y curación, desde nuestros Entrenadores Personales que revisaran las condiciones de tu actividad física, nuestros fisioterapeutas que valoraran y tratarán tu lesión dándote pautas para la mejor y más rápida recuperación y nuestro Podólogo si fuera necesario corregir algún factor intrínseco relacionado con la morfología de los MMII y su biomecánica, realizando un estudio de la marcha.